Decidí hacer una especie de grupo de enfoque en la misma clase en línea informando debidamente a padres y alumnos. Pedí consentimiento con los padres al inicio de la semana para que estuvieran al tanto del breve cambio de programa. Tuve la oportunidad de hacerlo con dos grupos, las clases son de 1 hora, lunes, miércoles y viernes. Los alumnos se mostraron interesados y entusiasmados, les expliqué el objetivo del proyecto, lo que íbamos a hacer y lo llevamos a cabo en una semana como una clase regular de acuerdo a la planeación. Creo que mostraron más entusiasmo al entender que yo quería que al final del mini-proyecto me dieran su opinión sobre si les había gustado y para qué les servía, se mostraban ansiosos en calificarme (: El tema también les atrajo mucho, pero debo confesar que se prestó para distracciones y algunas inquietudes de los papás quienes me preguntaron si les había dejado como tarea jugar videojuegos. Creo que al inicio, cuando les expliqué el mini-proyecto, no le prestaron demasiada atención. La manera para recabar la retroalimentación de mis alumnos también fue algo estratégica pues siendo niños suelen ser muy honestos pero fácil se pueden distraer con el tema, da mucho pie para que piensen que están sólo jugando y no están aprendiendo, por lo que al final decidí agregar una hoja de auto-evaluación y retroalimentación.
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